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V Aniversario Asturias travel bloggers en avilés

Parece que fue ayer, pero hace ya dos meses que tuvimos la oportunidad de conocer Avilés mucho más a fondo de lo que nunca pensamos. Hemos llegado a la conclusión de que por mucho mundo que veas, siempre habrá lugares cerca de casa muy interesantes y que te resultan desconocidos.

Tocaba celebrar el quinto aniversario de la asociación AsturiasTB, de la que formamos parte. Gracias a la colaboración del Ayuntamiento de Avilés tuvimos un día repleto de actividades para compartir con todos nuestros compañeros.

El día empezó temprano con una visita guiada al casco antiguo de Avilés, seguramente el mejor conservado de Asturias. En la misma puerta del Ayuntamiento nos esperaba Ana, nuestra guía, que nos acompañaría toda la mañana aportando una cantidad de datos que, pese a ser de la región, nos resultaban desconocidos.

De ella aprendimos que Avilés empezó teniendo forma de H, ya que es la forma que dibujan las tres calles más antiguas de la ciudad: la calle de la Ferrería, la calle de la Fruta y la Del Sol. También que era una ciudad amurallada, aunque ahora la muralla sea inexistente. De hecho, nosotros pudimos ver una parte, pero resulta prácticamente para cualquier visitante, así que aconsejamos ir acompañado de un guía.

También tuvimos la suerte de conocer el Espacio Portus. Nuestra guía, Ana, se unió a nosotros porque pese a ser de Avilés tampoco conocía las instalaciones. La Autoridad Portuaria de Avilés a reconvertido unos antiguos astilleros en un centro de interpretación del puerto de la ciudad que tanto tuvo que ver en la evolución de la misma a lo largo de la historia. Resulta muy interesante ver como una ciudad evoluciona alrededor de la actividad portuaria y, además, tienen una zona donde se puede descubrir todo el cañón submarino que rodea la zona. Tienen pantallas interactivas e incluso zonas donde puedes hacer uso de la realidad aumentada desde tu propio teléfono para acceder a más información.

Con tanta visita ya iba entrando el hambre. Nos dividieron en dos grupos para que probásemos dos sitios diferentes y a nosotros nos tocó el Restaurante Del’Alba. Resultó ser un lugar muy acogedor con un servicio muy profesional. Íbamos con el menú ya cerrado y en todo momento se pararon a explicarnos las elaboraciones. Todo estaba perfecto y tengo que reconocer que aún sigo soñando con el sabor del salmón que probamos. Es un sitio para repetir.

Ahora sí, con el estómago lleno, tocaba visitar uno de los emblemas de la ciudad, el Centro Niemeyer. Con el paso del tiempo se ha convertido en reclamo cultural de la ciudad. Alberga exposiciones y, durante todo el año, se puede disfrutar de obras de teatro, cine, conciertos y todo tipo de eventos. Aunque nosotros ya habíamos ido varias veces nunca habíamos podido visitar todos sus espacios. Lo que más nos impresionó, sin duda, es poder entrar al escenario donde tantas obras habíamos visto y comprobar su tamaño. Mucho, pero mucho más grande de lo que jamás podíamos haber imaginado.

También tuvimos la suerte de tener una visita guiada al Palacio de Avilés. Es un antiguo palacio reconvertido en hotel por los anteriores dueños, que han hecho un gran trabajo de conservación del edificio. Las escaleras de madera de la torre, por ejemplo, ¡son impresionantes! Allí pudimos asistir a un taller del mantecado de Avilés, dulce típico de la ciudad. Su historia es increíble. Se trata de un dulce que surgió de la necesidad de tener algo de comida que se conservase durante mucho tiempo, ya que los marineros lo comían durante el largo viaje en barco hacia América.

Y, para acabar, no podía ser de otra manera… terminamos con una espicha. Nos dirigimos a la Cantina de Villalegre donde nos reservaron una zona en la que estar tranquilos. Tenemos que hacer mención a la mano que tiene Pili para la cocina. ¡Todo lo que nos sacó estaba buenísimo! Sobre todo, la fabada, una de las mejores de Asturias. Nos trataron genial y, cuando ya estábamos agotados, nos tocó retirarnos al hotel que nos habían asignado.

En el Alda Palacio Valdés descansamos después de un intenso día recorriendo Avilés de una punta a otra. Tuvimos la suerte de disfrutar de su historia, su cultura y su gastronomía y ahora tocaba un buen merecido descanso en nuestra habitación con vistas al impresionante Centro Niemeyer. Por la mañana tocaba volver a casa después de una jornada intensa y muy divertida.

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Gijón de compras

¿Nunca te ha pasado que tienes la sensación de que sabes todo de tu ciudad y que ya nada te puede sorprender? No pasa nada, la gente se equivoca… ¡y nosotros los primeros!

Esta semana hemos descubierto la aplicación Gijón de Compras que ofrece diferentes rutas enfocadas en distintos tipos de comercio local. En principio es una idea más enfocada al turismo, pero la verdad es que también es toda una sorpresa para los que vivimos en la ciudad. Nosotros mismos hemos descubierto locales que no conocíamos y a los que tenemos pensado volver.

Hay varios itinerarios disponibles y para todos los gustos:

  • Gijón dulzón te llevará a descubrir las mejores confiterías y heladerías de la ciudad. Gracias al bono de Gijón goloso puedes disfrutar de una pequeña muestra del trabajo de cada local. Cada confitería elabora un producto en concreto para la gente que hace la ruta.
  • Gijón artesano incluye una ruta con los comercios que elaboran sus propios productos a mano. Desde joyerías a la confección de bolsos artesanales, pasando por papelerías. Todo un mundo por descubrir.
  • Compra gastro. Sobran las palabras. Los mejores productos gastronómicos de la ciudad en una de las rutas más extensas de la aplicación. ¡Se nota que en Asturias somos de buen comer!
  • Diseño y moda. Si el diseño y la moda son tu pasión, vas a disfrutar como un niño. Es sin lugar a dudas la ruta más larga que nos ofrecen. Comercios dedicados a la ropa, calzado, bolsos, bisutería y complementos de todo tipo inundan las calles de Gijón
  • Arte y cultura. No puedes imaginar la cantidad de librerías que hay por el centro de Gijón hasta que ves esta ruta. Y si lo tuyo no son las letras no te preocupes, ¡hay un montón de opciones! Desde tiendas de música hasta galerías de arte
  • Comercios con historia.Y por último, como no, una ruta para los comercios de siempre. Esos negocios que son historia viva de la ciudad, que llevan décadas acompañando a los gijoneses y que son una referencia para todos.

En nuestro caso elegimos la ruta de Gijón Dulzón y la verdad es que fue todo un acierto. Durante un par de horas dimos un agradable paseo visitando los locales que nos ofrecía la aplicación y disfrutando de las diferentes propuestas de cada local.

Además, con el bono de Gijón Goloso puedes probar de 5 a 10 de las mejores especialidades dulces de la ciudad, dependiendo del bono que elijas. Nosotros elegimos el de 10 y volveríamos a por más sin dudarlo. ¡No podríamos elegir un favorito de entre todas las cosas que probamos!

Es de agradecer la iniciativa de Visita Gijón para que tanto turistas como locales podamos disfrutar y conocer un poco más de la ciudad.  Y una de las cosas que más nos gusta es que todos los comercios participantes cuentan con el distintivo Biosphere Comitted, que avalan su compromiso de aplicar prácticas sostenibles siendo respetuosos con el entorno.

La aplicación es totalmente gratuita y está disponible tanto para Android como para iOS, así que no hay excusa. ¡Nos vemos por Gijón!